domingo, 22 de abril de 2007

Voy a detenerme en la clase del día viernes cuando tuvimos la visita de l@s compañer@s que se hayan en su práctica profesional, destacando cada uno sus vivencias dentro del aparato municipal y particular-subvencionado.
Para ser franca creo que se rayó mucho en lo anecdótico lo que me trajo bastantes recuerdos de situaciones vividas cuando estaba en el liceo en la enseñanza media, por lo que no me causó mayor impresión, pero no por eso deja de ser relevante y cuestionable pues eso sigue demostrando que las dificulatdes para hacer clases son aquí y en la quebrá del ají, dificultades que van más allá de lo conductual, falta de entusiasmo que repercute en la desatención y el desanimo en general, osea sólo ír a calentar el asiento.
Por otro lado la escasez material de recursos y herramientas que facilitan realizar la clase, el ¿cómo? al que se referían , sin embargo no por esto la clase va a ser irrealizable porque también es posible recurrir a otras opciones que hacen posible el aprendizaje, más allá de presentar un video, usar data show o entregar textos fotocopiados para l@s estudiantes como por ejemplo trabajar realizando foros, mesas de discusión y de participiación de estos en la clase, actividad que además fomenta el análisis por medio de la discusión, la participación que hace desarrollar la personalidad del estudiantes al enfrentarse al grupo, enriqueciendo el lenguaje y conocimientos entre otras cosas. Aunque ahora por otro lado esto va a depender del interés de ellos por participar, por hacer la clase, porque sin motivación por más herramientas y técnicas que se ocupen va a ser difícil la realización de las actividades. Creo que para ello se debería tomar el interés que l@s estudiantes tengan en relación a un tema que estos planteen contextualizándolo a lo que el programa dice que "debemos" trabajar, pues muchas veces el desinterés no es por lo que la o el profe enseña, sino por como utiliza eso que está enseñando, osea el enfoque que le da.
Que exista un ¿cómo? poder hacer posible la clase me genera molestia, por ejemplo en una visita realizada a nuestros vecinos y vecinas del Liceo B-12, Polivalente, con la Jornada Escolar Completa y que prepara a los y las estudiantes para el mundo laboral (¿DETERMINISMO????), según señalaba el jefe de U.T.P sólo contaban con un data show para los 700 estudiantes, una biblioteca pequeña y de pocos textos, aproximadamente un ejemplar por cada 5 compañer@s , un comedor para 30 entre más cosas que dificultan el aprendizaje y el bienestar en la escuela; esto en comparación con el Colegio Concepción perteneciente a una corporación masónica, con alto nivel de competencia, formando a estudiantes integrales y ¿cómo no van a formar a esas y esos privilegiados si poseen una infraestructura y herramientas que les permite realizar el aprendizaje apoyándose de elementos varios dentro y fuera del aula, además de ver a el y la estudiante como futuro profesional?.
Al graficar estas distintos escenarios se me plantean dos dudas ¿porqué existen los colegios y liceos particular-subvencionado si se supone que cuentan ya con un respaldo económico detrás (mensualidad)? ¿es pertinente que se le entrege esta subvención de $30.000 por alumno presente en la clase, extra a la mensualidad habiendo liceos que se las deben ingeniar con 1 data show para 700 estudiantes......................................................?
Creo que da para otra discusión.

1 comentario:

Profesora dijo...

Estimada estudiante
Efectivamente, no todos los colegios tienen los medios tecnológicos para trabajar en el aula, pero cuando nos referimos al CÓMO no hablamos sólo de ellos, el cómo responde a las estrategias y técnicas que utilizaremos para enseñar y ellas muchas veces le darán el enfoque que tu mencionas, no habla sólo del como les muestro un mapa a través del data, sino de que forma (debate, simposio, juego de roles, lluvia de ideas) abordaré los contenidos, sean éstos conceptuales, procedimentales o actitudinales.
Por otra lado, para la evaluación de tu blog, te recomendaría documentar tu reflexión.
Atentamente,
La profesora